martes, mayo 16, 2006

Galeano rockstar, metrosexual.

Hoy no voy a hablar de la trasnochada de Tlatelolco, pero sí un poco de la charla con Galeano. De él, sólo he leido Las Venas.. y fue a propósito de su manejo del tema del azúcar, que efectivamente terminó siendo un poco más entretenido que un panfleto sobre los riesgos de la diabetes.
Entiéndase que el diálogo de anoche se dio -ultraverticalmente- ante un ambiente estudiantil {97% siendo pandrosines altermundistas} en unos de los anfiteatros más importantes de la UW. Como si fuera el célebre Auditorio Ho Chi Minh en tiempos de Rangel Frías, sobresalió la amplia disposición del público a acoger -con morboso beneplácito- la bola de insultos y palabrerías del autor en contra de la administración republicana que sobrevivimos actualmente. Mucha hilaridad pero poca novedad: el ponente despreció tajantemente las instituciones modelo y en consecuenta, le fue tributada una ola de aplausos y reverencias de parte de tooooodas las oyentes que asomaban tangas fritas. En la sesión de preguntas, un solo punto galeanista no pudo ser cuestionado, todo alabado. Y pa' colmo: 'Si no entienden bien mi inglés, compren mis libros'.
Pero bueno, no obstante la pena ajena, sí absorbo una frase que me pareció aceptablemente incendiaria y contumática: "Nunca te escupas al espejo". Implicada reflexión ahora que ya es temporada de guardar suéteres, bufandas, chamarras y brasieres.